lunes, 15 de febrero de 2021

 Hay días en que no me siento apta para desempeñar mi papel y me cuesta mucho mantener la formalidad que se necesita.

Últimamente tengo muchos de esos días.

Hoy es uno de esos días.

sábado, 6 de febrero de 2021

Alien

Más a menudo de lo que quisiera tengo en el pecho esta sensación de que no pertenezco en ningún sitio. Ni en mis labores, ni en compañía, ni en el lugar que debería llamar "hogar".

En ocasiones se mitiga cuando me encuentro con almas compatibles a mí pero al final del día vuelvo a convertirme en este ser que no pertenece en ningún sitio.

Pareciera estar condenada a deambular por el mundo sola y con frío hasta que llegue el final de mis días ¿Es que acaso alguna vez encontraré abrigo? ¿Existe un lugar en este mundo al que pueda llamar mi hogar?

Llegué a este mundo en un nido roto que ya estaba completo y no buscaba ni quería a nadie más. Y sin embargo yo emergí, producto de las hormonas descuidadas de dos personas irresponsables que no deseaban una nueva adición.

Durante mi primera infancia fui una novedad, una muñequita graciosa que exhibir, una moda... Pero al perder esa dulce ingenuidad que caracteriza a las criaturas me convertí en un lastre del cual avergonzarse, y eventualmente en la materialización de todo lo deforme y retorcido que existía en este linaje.

Y se me quiso a medias, como no queriendo, como obligados... Apenas queriéndome, apenas soportándome.

Y me quise una mísera fracción de eso, porque si mi origen me despreciaba tanto ¿Cómo podría yo valer algo? Sería una insolencia pensar que soy un ser bello, dulce... Sensible... Que merece un sitio al calor del fuego en la noche fría, mientras todos festejan la belleza de la vida.

A veces desearía que no me hubieran tenido. Más a menudo de lo que es sano admitir. A veces desearía que aquellas células no se hubieran dividido. Quizá siendo una memoria melancólica me habrían adorado, quizá a la ilusión de un bebé que no tuvo oportunidad de mancharse sí la habrían acurrucado unos brazos cálidos junto al resto de la familia a la que pertenezco a la fuerza, por la sangre que ata pero no entiende de amor.

¿Qué soy? No soy nadie. Soy el polvo, soy el aire, soy una hoja seca sobre el suelo de un lugar desierto, esperando a disolverse en la tierra, con la ilusión de tener una segunda oportunidad más adelante.

Oh... Pero cuanto desearía en ocasiones no haber existido jamás. Cuanto lo deseo ahora... Quisiera evaporarme y fundirme con la atmósfera, y que nadie me recuerde, que nadie me extrañe, que nadie sepa que existí. Tal vez borrando mi existencia se restauraría el equilibrio perdido. Sé que no les dolería que yo no hubiese existido nunca, ellos ya estaban completos. Yo sólo fui un estorbo para ellos.